HANNAH ARENDT en Verdad y política nos introduce el tema de sus reflexiones como un lugar común. ‘Nadie ha dudado jamás que la verdad y la política nunca se llevaron demasiado bien, y nadie, por lo que yo sé, puso nunca la veracidad entre las virtudes políticas. Siempre se vio a la mentira como una herramienta necesaria y justificable no sólo para la actividad de los políticos y los demagogos sino también para la del hombre de Estado. ¿Por qué? ¿Qué significa esto para la naturaleza y la dignidad del campo político, por una parte, y para la naturaleza y la dignidad de la verdad y de la veracidad, por otra? ¿Está en la esencia misma de la verdad ser impotente, y en la esencia misma del poder ser falaz? ¿Y qué clase de poder tiene la verdad, si es impotente en el campo público, que más que ninguna otra esfera de la vida humana garantiza la realidad de la existencia a un ser humano que nace y muere, es decir, a seres que se saben surgidos del no-ser y que al cabo de un breve lapso desaparecerán en él otra vez? Por último, ¿la verdad impotente no es tan desdeñable como el poder que no presta atención a la verdad? Estas preguntas son incómodas pero nacen, por fuerza, de nuestras actuales convicciones en este tema».
«Este ensayo nació de la presunta controversia surgida tras la publicación por Arendt de Eichmann in Jerusalem. Su finalidad fue poner en claro dos temas distintos, pero conexos, de los que no toma conciencia antes y cuya importancia parecía trascender a la ocasión. El primero se refiere a la cuestión de si siempre es legítimo decir la verdad, de si creo sin atenuantes en lo de Fiat veritas, et pereat mundus. El segundo surgió de la enorme cantidad de mentiras que se usaron en la «controversia»: mentiras respecto a lo que Arendt había escrito, por una parte, y respecto a los hechos sobre los que informaba, por otra»
Pues eso: …¿Y si todo fue mentira, todo fue mentira, todo lo que yo creí real? ¿Y si todo fue mentira qué hago ahora con mi vida?…
¿Y si empezamos de cero hoy mismo amor mío?
Estoy de acuerdo cariño empecemos, pues, de cero
Ni nos conocemos ni nos conoceremos
Si las cosas fueran a partir de ahora distintas
Si me miraras con ojos nuevos, mi vida
Tendría que ser nueva, corazón, mi mente entera
Para mirarte sin que me de percerguera
¿Y si lo nuestro fuera pura cosa del destino?
¿Y si me lleva a ti cada camino?
Entonces da la vuelta cosa guapa, échate un trago
Luego haz diez veces el camino de Santiago
Y un lustro que parece un siglo por detrás
Hay una bomba en Junquera, te cercenará las piernas
Retarás hasta la puerta
¿Querrías repoblar conmigo este planeta?
Que si llevamos, tesoro, juntos más de cinco otoños
Y aún no aprendiste ni a comerme bien el coño
No, no, no tengo por qué aguantar esas impertinencias
¿Y si algún día se me agota la paciencia?
Lo que se ha agotado, cielo, y no te has enterado
Es mi amor por ti, hemos terminado
Que pase un siglo y que aún sigamos igual
Hay una bomba en Junquera, te cercenará las piernas
Retarás hasta la puerta
Solo un día más y una nueva atrocidad
Solamente un día más para tocar fondo y aún para escarbar
Solo un día más y una nueva atrocidad
Que estamos hechos justo el uno para el otro
Y si tu descubrieras lo que verte me produce
Hay prenda mía enciende de una vez las luces
¿Y si pudiera hacer algo y cambiar la historia entera?
Haría cualquier cosa que tu me pidieras
Se me ocurre algo si tan fácil me lo pones
¿Por qué, dulzura, no te cortas los cojones?
¿Y si todo fue mentira, todo fue mentira, todo lo que yo creí real?
¿Y si todo fue mentira qué hago ahora con mi vida?
Esto es tan solo una sugerencia pero tal vez
Piensa que desaparecer es siempre una opción
Solo un día y ya no habrá más que oscuridad
Solamente un día más y esa sería tu última atrocidad
Solo un día más y quedaremos en paz