“La importancia real de la lectura es que crea facilidad e intimidad con el proceso de escritura; uno llega al país del escritor con sus documentos e identificación bastante en orden. La lectura constante nos llevará a un lugar (una mentalidad, si nos gusta la frase) donde podemos escribir con entusiasmo y sin conciencia de un@ mismo. También nos ofrece un conocimiento en constante crecimiento de lo que se ha hecho y lo que no, lo que es trivial y lo que es nuevo, lo que funciona y lo que simplemente está ahí muriendo (o muerto) en la página. Cuanto más leamos, menos propensos seremos a hacer el tonto con nuestra pluma o procesador de textos. . . .
«[R] leer mucho, escribir mucho» es el gran mandamiento «.
Stephen King, sobre la escritura en la escritura: una memoria del arte
Stephen King, On Writing On Writing: A Memoir of the Craft
Casi sin querer
Se me escapa, se me nubla, no se acaba
Casi sin querer
No hay nada ya
Tocarte por dentro, besar
No hubo y no habrá
No hay nada aquí ya
Volarme y al tiempo volar
El viento no, el viento, el viento no
Que sin ti soy nadie
Sin ti yo no, sin ti, sin ti yo no
Casi sin querer
Y la duda en sentimiento transformada
Casi sin querer
No hay nada ya
Tan bello es caer a tus pies
No hubo y no habrá
No hay nada aquí ya
De quién este cielo es de quién?
El viento no, el viento, el viento no
Que sin ti soy nadie
Sin ti yo no, sin ti, sin ti yo no
No hay nada ya
Tan bello es caer a tus pies
No hubo y no habrá
No hay nada aquí ya
De quién este cielo es de quién?
El viento no, el viento, el viento no
Que sin ti soy nadie
Sin ti yo no, sin ti, sin ti yo no
El viento no, el viento, el viento no
Que sin ti soy nadie
Sin ti yo no, sin ti, sin ti yo no
Yo no, yo no, yo no
Yo no, yo no, yo no
Yo no, yo no, yo no